En el año 1930 Henry Ford tomó la decisión de introducir en la producción de la Ford Motor Company una línea de ensamblaje en continuo movimiento, esto fue posible gracias a que se dividió una operación muy compleja en diferentes procedimientos sencillos, generando así un hito en la evolución de la calidad.
Durante la Segunda Guerra Mundial se aportó también un granito de arena para la evolución del concepto de calidad, ya que se generan la necesidad de disponer de ciertas normas para el diseño y el control de la fabricación, garantizando que se dispondría de ciertos equipos militares con una calidad garantizada. La normativa se vio acompañada de ciertos procedimientos de calidad que las completaban.
Con el paso del tiempo se utilizan procedimientos que de forma estandarizada se extendieron de forma rápida por varios sectores de la industria.
No podemos olvidarnos de que el origen de la norma ISO 9001 se sitúa en la primera norma de Gestión de la Calidad que fue desarrollada por el Reino Unido y fue denominada BS 5750 y se impulsó por el ministerio de defensa. En el año 1987, la norma ISO 9001 adaptó la BS 5750 a todas las necesidades de una norma internacional y se añadieron diferentes variantes que permitían que se adaptar a todas las necesidades de los diferentes tipos de empresas que había en aquella época.
Con todo esto que hemos contado nació la familia de normas ISO 9000 que establece un lenguaje común para todos los Sistemas de Gestión de la Calidad y que presentan una elevada repercusión a nivel internacional llegando a convertirse en un referente a nivel mundial.
Desde este momento, las normas se han ido adaptando a todas las necesidades del mercado y de las organizaciones, además se han revisado en diferentes ocasiones:
- 1994: la revisión de ISO 9001 centró su atención en la introducción de las acciones preventivas garantizando la calidad del producto en lugar de comprobarse en el momento de su finalización.
- 2000: es un cambio radical en relación con la anterior versión ya que se centra en el objetivo de comprender todos los requisitos y las expectativas de los clientes antes de diseñar los requisitos y las expectativas generadas por los clientes antes de diseñar los procesos que ayudan a conseguirlos. La ISO 9001 revisión introdujo la necesidad de mejora de forma continua de los procesos y realizar el seguimiento de la satisfacción del cliente.
- 2008: durante esta revisión de la ISO 9001 sólo se clarificaron los requisitos que ya existían en la norma anterior. Se incorporaron algunos cambios que acercaron la norma a la ISO 14001.
- 2015: lo vemos a continuación.
Ciclo PDCA: el ciclo sin fin
La metodología PDCA se encuentra presente en la norma ISO 9001 revisión 2015, por lo que se puede aplicar a todos los procesos y formar una base sobre la que se sustente el Sistema de Gestión de la Calidad.
Cuando decidimos enfrentarnos a la implementación, desarrollo o auditoría de ésta, debemos tener siempre presente que tenemos que recordarla:
- Planificar: se establecen diferentes objetivos, los procesos y los recursos que resultan necesarios para conseguir los resultados necesarios.
- Hacer: se implementa todo lo que hemos planificados.
- Verificar: se verifica el seguimiento, en los casos en lo que sea posible. Se realiza una medición de los procesos con respecto a los aspectos que hemos planificado, además se deben tener en cuenta las políticas, los objetivos y los requisitos que establece la norma ISO 9001.
- Actuar: con todos los datos que hemos obtenido, se realizan las acciones de mejora necesarias.

Los siete pilares: Principios de la gestión de la calidad.
De igual forma que el ciclo PDCA influye en la norma ISO 9001, todos los principios de la gestión de la calidad aportan su granito de arena en la estructura y los puntos de referencia que toma en el Sistema de Gestión de la Calidad.
Se debe hacer referencia a los siete principios actualizados junto a la norma ISO 9001 por parte de los expertos del Comité Técnico ISO/TC176 y se encuentran presentes en toda la norma ISO 9001.
Los siete principios son:
- Enfoque al cliente: una organización solo puede conseguir el éxito cuando consigue fidelizar a todos sus clientes y a las partes interesadas. Esto se puede conseguir gracias a la interacción con el cliente, generando valor añadido y comprendiendo todas las necesidades y las expectativas, presentes y futuras.
- Liderazgo: es una de las funciones esenciales de todos los líderes, se crean unidades de propósito e implicación de todo el personal de la organización.
- Participación del personal: resulta esencial para la correcta evolución de la organización y para el establecimiento del Sistema de Gestión de la Calidad que el personal sea competente y se encuentre implicado, ya que de esta forma se añade valor a la empresa.
- Enfoque basado en procesos: se deben comprender todas las actividades que realiza la organización, como pueden ser los procesos que se encuentran interrelacionados lo que permite conseguir los resultados que se han establecidos y se deciden cuáles son las medidas más adecuadas. Se encuentra presente en todo el Sistema de Gestión de la Calidad.
- Mejora: la mejora continua ofrece éxito a las organizaciones, ya que resulta esencial para mantener todos los niveles de desempeño. Se adaptan a los cambios que se puedan producir, de forma interna o externa y se pueden aprovechar de las oportunidades que se presenten.
- Toma de decisiones basadas en la evidencia: si deseamos tener más posibilidades de conseguir los resultados deseados, resultará esencial que tomemos las decisiones necesarias basándonos en el análisis y en la evaluación de los datos recopilados.
- Gestión de las relaciones: cuando se quiere valorar el desempeño de la organización no nos podemos olvidar de la influencia que presentan las diferentes partes interesadas.