Normativa ISO 9001: Generalidades

La normativa ISO 9001

La normativa ISO 9001 la establece la Organización Internacional de Normalización (ISO) que es un organismo que se encarga de elaborar normas técnicas a nivel internacional. Hay diferentes tipos de normas ISO desde la gestión del riesgo, la calidad, el medioambiente o la seguridad, entre otras.

Específicamente, la normativa ISO 9001 se centra en establecer los requisitos mínimos para obtener un Sistema de Gestión de Calidad (SGC) en una empresa o institución, con independencia del fin económico que siga, el enfoque que tenga, su tamaño o cualquier otro factor que la caracterice.

¿Qué es un Sistema de Gestión de Calidad?

Un Sistema de Gestión de Calidad, como su propio nombre indica, es un sistema formal que documenta de la manera más exitosa posible para la empresa sus procesos y formas de actuar para que la consecución de los objetivos se haga con la mayor calidad posible. Además, esta implementación se debe diseñar desde el interior de la empresa siguiendo un plan estratégico y específico para cada una de las etapas.

Tener un SGC ayuda a la coordinación, optimización y dirección de las organizaciones para mejorar la puesta en marcha de actividades internas tanto de fabricación, diseño, distribución y venta, de modo que el grado de satisfacción de los clientes sea óptimo. En definitiva, su fin principal es conseguir mejorar constantemente los procesos.

Elementos esenciales del Sistema de Gestión de Calidad

Hay dos categorías principales donde pueden agruparse el grueso de los componentes del SGC que serían:

• Capital humano: los integrantes de una empresa. El valor de este factor está compuesto por el grado de formación, la productividad de las personas que componen el equipo y su experiencia en el sector. Esta valía no es fija, sino que puede verse incrementada con la inversión en cursos específicos de formación para conseguir éxitos laborales.
• Recursos técnicos: todos los procedimientos, organigramas, técnicas, herramientas, dispositivos, etc., es decir, todos aquellos elementos que permiten al capital humano desarrollar adecuadamente sus funciones, incluidas la de implementar el Sistema de Gestión de Calidad.

Otros conceptos a tener en cuenta

Hay que tener claro que el Sistema de Gestión de Calidad es algo complejo, pero de gran utilidad si se trabaja previamente y de manera adecuada. Por ello, hay una serie de conceptos primordiales a tener en cuenta:

• Manual de calidad

Documento donde queda plasmada la misión y visión de la empresa respecto a la calidad que quiere conseguir, sus políticas y objetivos para cumplimentarla. Es importante que la organización tenga clara esta guía, aunque no es un requisito para ISO 9001.

• Auditoría

Documento en el que se registran cada uno de los pasos que dan las empresas y donde puede verse si está o no cumpliendo los objetivos marcados de calidad. Esta auditoría empieza siendo interna, es decir, queda desarrollada por el propio personal, aunque dirigida por un auditor.

• Registros de calidad

Documentos con los que se cuidan y se facilitan evidencias de las actividades desempeñadas tras la instalación del SGC. Es de gran utilidad, pues ayuda a prevenir fallos, aportando soluciones específicas.

• Compromiso

Grado de responsabilidad que asume una organización ante los desafíos planteados para una mejora continua de sus procesos. Se suele medir por niveles y no solo se tiene en cuenta la actitud, sino también las herramientas utilizadas.

• Expectativas

Lo que los clientes piensan sobre el producto, es decir, la concepción que tienen. Es muy importante conocerlas para poder diseñar estrategias de calidad específicas en cuanto a sus percepciones.

• Objetivos de calidad

El proceso inicial antes de la ejecución del SGC. Se refiere al qué quiero conseguir con este Sistema de Calidad, la guía que se debe seguir.

• Responsabilidad

Delegación de responsables que se encargan de la puesta en marcha y supervisión de las distintas fases del proceso. Suelen ser personas altamente cualificadas y preparadas para la dirección de una empresa.

 Beneficios principales de ISO 9001

Una vez queda teóricamente claro en qué consiste la normativa ISO 9001 centrada en la calidad, hay que conocer cuáles son los beneficios que esta tiene en la práctica.

• Mejora la credibilidad y la imagen de la organización: asegura la calidad del producto ofertado y adquiere mayor relevancia frente a sus competidores con la obtención de dicho certificado.
• Mejora la satisfacción del cliente: cuanto más satisfecho, mayor facilidad para fidelizar a los consumidores y atraer a nuevos.
• Mejora la integración de los procesos: permite ser más eficiente, ya que se reducen los fallos con la automatización y, por ende, los procesos de corrección.
• Se crea una cultura de mejora continua: búsqueda constante de soluciones rápidas a los retos que vayan surgiendo, recalcando el punto anterior de la eficiencia.
• Mejora la participación e interacción entre la alta dirección y los empleados: la toma de decisiones no es algo aislado de la dirección, sino que se tiene en cuenta las mejoras propuestas por el personal que trabaja a diario en estos procesos.

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